Para terminar con la trilogía de la Semana Cultural os dejo unas imágenes de la visita al jardín botánico de Málaga. Después de recorrido se bajó a la playa en Benalmádena. Parece mentira que a primeros de julio estuviera el agua tan fría. Tampoco ayudó mucho el persistente viento que sopló durante toda la jornada, pero no importó para que grandes y chicos disfrutaran de lo lindo.
Como vemos, era poca la gente que se atrevió a remojar sus carnes.
En resumen, una jornada estupenda que tuvo su colofón a muchos kilómetros de aquí, en Ucrania. Pero esa es otra bonita historia...