Brácana. Pueblo pequeño y tranquilo donde los haya; lugar en el que parece que el tiempo va más lentamente en comparación con el bullicio de las ciudades. Algo que
los que viven en ellas saben agradecer y valorar y que los residentes quizá no apreciemos tanto.
Es por eso que estas imágenes van dedicadas a los "prisioneros del cemento, el tráfico y el ruido". Porque sé que sabreis valorarlas aunque os gusten más o menos.
La naturaleza nos ofrece a veces momentos y escenas que vale la pena inmortalizar; y eso es lo que hice una tarde cualquiera de principios de Diciembre.
Esperamos que os gusten.
Y como siempre, recordaros que podeis hacer comentarios de lo que querais, preguntar dudas, etc.
Un saludo a todos-as y seguimos al pie del cañón.
